LA CITA OBLIGADA
El pasado día 26, como era de esperar, se presentó en España el Iphone 6, la última creación de Apple(www.apple.com/es). Y ciertamente el fabricante de la calle Infinite Loop de Cupertino, se estaba quedando atrás con unos productos lejanos a la tendencia del mercado.
Siempre la marca quiso desligarse de este camino señalizado con balizas a lo largo de todo el recorrido, haciendo productos diferentes. Lo primero, acercando la computación al común de los mortales, pero enseguida luchando por dotar a sus creaciones de un gran sentido estético. Belleza tecnológica. Y en efecto. Un producto de tecnología puntera no tiene por qué ser feo, aburrido o mal terminado. En esto Apple siempre se ha llevado la palma.
Se ha dicho que la empresa obtiene su gran beneficio del simple principio de mercado de comprar barato y vender caro. Correcto. En esta última edición de su terminal de telefonía móvil, se barajan cifras de entre 148 y 160 euros de precio de coste para el terminal básico, que se ha puesto a la venta en 699 euros.
¿Qué hace que hay en todas las tiendas del mundo decenas de personas esperando la apertura de su tienda Apple para hacerse con cada nuevo producto que lanzan? Eso quisieran saber también las marcas de la competencia. El caso es que, según parece, hay clientes que tienen siempre guardados 1000 euros por si acaso a Apple le da por sacar un nuevo dispositivo.
En esta ocasión, tenemos dos terminales diferentes, según el tamaño de pantalla por el que optemos. Puede ser el Iphone 6, que cuenta con 4,7" (699 Euros-16Gb, 799 Euros-64Gb, 899 Euros-128Gb). También puede ser el Iphone 6 Plus, con una pantalla de 5,5" (799 Euros-16Gb, 899 Euros-64Gb, 999 Euros-128Gb). Lo más curioso es que el modelo básico, ha salido en Estados Unidos en un precio de 199 dólares (156 Euros). Es una gran diferencia sólo por cambiar de continente.
Lo más probable sea que los responsables del producto, hayan caído en la cuenta que no importa el precio que pongan, la gente galopará sin descanso hasta hacerse con el preciado objeto de sus sueños.
Al respecto de la pantalla, se ha utilizado en ambas versiones la pantalla Retina HD, en el caso del Plus, cuenta con 1900 X 1080 ó lo que es lo mismo 401p/p. Todo ello integrado en una carcasa de aluminio anodizado que queda ajustada a la perfección.
Si hablamos de la autonomía, siempre ha sido uno de los puntos fuertes de la casa. Si la batería en otros fabricantes va perdiendo eficiencia, en el caso de Apple, suele mantenerse en el nivel que anuncian desde el principio. En Modo 3G, se habla de entre 14 y 24 horas, lo cuál es un gran avance. La autonomía es el gran punto pendiente de la telefonía moderna, conjuntamente con la resistencia de los materiales. Para lograrlo, Apple ya usa su procesador A8, con arquitectura de 64Bits. Además de hacer más eficiente el uso de batería, consigue un rendimiento más rápido en todas las acciones del terminal.
En conectividad, la novedad con respecto a sus predecesores, es la inclusión del sistema NFC, probablemente con el objeto de lanzar el sistema de pago Apple Pay. Este tipo de pagos está implantado en muchos países ya, pero la novedad es la utilización de la huella digital para asegurar que el terminal es tuyo y no ha sido robado para hacer compras con él. En Apple planean este sistema presente en 150 países a lo largo del 2015.
Si bien la marca asegura que las cámaras han mejorado el resultado con respecto a la versión 5, la resolución se sigue manteniendo en 8MP. Lo encuentro un tanto escaso para las demandas del mercado actual en esa línea de trabajo, sobre todo cuando cada vez más los fotoperiodistas usan dispositivos móviles para realizar las tareas encomendadas por los medios.
El vídeo se mantiene en 1080p a 30 ó 60 fps. Y la memoria Ram de 1Gb no ha variado respecto de la anterior generación.
En conclusión, la pregunta que queda en el aire es si en realidad, aunque parece que Apple ha hecho los deberes en cuanto a la lucha con la competencia, adaptándose al mercado en este caso sin tapujos, ¿Merece el producto el precio que se pide por él? Pero también. ¿Merece la pena pagar los precios por los terminales de gama alta y última generación que tienen las grandes marcas?
Creo que no.
Clavius